viernes, 10 de abril de 2015

Escribir un diario



Como ya te he platicado antes, empecé a escribir un diario a mis 15 años, hace algunos ayeres, era mi manera de decirme a mi misma que no importaba lo que estuviera pasando, que todo iba a mejorar.

Al día de hoy tengo muchos diarios de diferentes formas y tamaños, el primer diario por ejemplo, esta en las hojas que me quedaban de un cuaderno viejo de la escuela; El que comencé cuando cumplí 17, es un Scribe profesional forrado con las envolturas de un Carlos V (Chocolate), ahora son creados por mi desde cero.

Y los amo tanto, ellos fueron en gran parte responsables de que todo volviera a cobrar sentido.

Has escuchado la frases ¡la vida es corta! , ¡el tiempo no vuelve! , ¡la vida es para vivirla!, normalmente son frases que vienen acompañadas de un cuestionamiento ¿Qué estas haciendo con tu vida? , la cual, te hace sentirte responsable con la sociedad por lo que estas decidiendo o no.

Sin embargo, creo que nuestra vida es demasiado rutinaria, creo que somos una especie llena de metodologías, como por ejemplo, ¡yo no salgo de casa sin bañarme! O ¡en pijama al súper, nunca! O ¡todos los días tengo que lavar los trastes!
¿Que tiene eso de épico o especial?

En esa rutina es donde la sociedad o nosotros mismos (que es peor) nos ponemos estereotipos que en muchas ocasiones nos llevan a perder el sentido.

Como te platicaba la semana pasada la vida te pide entregas, en muchas ocasiones nos aferramos a cosas, objetos, deseos o personas que no son para nosotros, e irremediablemente la vida nos lo va a quitar en algún momento estemos listos o no.

Y acabo de pasar por un proceso así, la vida llego como un torbellino y se llevo tanto, que le quito sentido a mi vida. ¡Me quise morir!

Fue entonces, cuando me acerque a mi librero rojo, un librero que yo misma construí hace algunos años, el cual conserva fielmente mis diarios y ahí uno a uno empecé a leer mis diarios; ¡Me redescubrí de tantas maneras! , ¡Aprendí tanto de mi! , algo que pasaba constantemente por mi cabeza, es si tome las decisiones correctas, en mis diarios descubrí que lo que menos importaba era si la decisión era correcta o no, ERA MI DECISIÓN!!
Ideas que yo venía trabajando desde hace años, las encontré en diferentes hojas, en diferentes días y en diferentes años.
Ideas que fueron como semillas sembradas en mi cabeza, en mis letras, en mis dibujos, en mis diarios, hasta que crecieron y las hice realidad.

Mis diarios me ayudaron a ver que los grandes problemas que tenía hace 10 años, que me hacían llorar y sufrir, el día de hoy son grandes lecciones, que me hacen ser quien soy hoy.

Me enseñaron que no hay problemas grandes ni pequeños, sino lecciones que requieren tiempo.

Mis diarios me mostraron que si soy lo que quise ser y que seguir escribiendo mi vida me llevara a nuevas experiencias, no importa cuales, no importa como.

No dejes que nadie escriba tu vida, ¡Escríbela tu misma! ¡Escribe un diario!

Gracias por estar.
Mis diarios para ti.